Cabrera, una pequeña isla frente a la costa de Mallorca en el archipiélago balear, esconde una terrorífica historia de genocidio. Alrededor de 9.000 soldados napoleónicos fueron abandonados en esta isla prisión, entre 1.809 y 1.814. Tan solo sobrevivieron 3.500 tras pasar 5 largos años de intentos de fuga, tormentas, enfermedades y muerte.
Algunos historiadores describen estos sucesos como el primer campo de concentración documentado.
Con este documental queremos abordar los increíbles hechos que ocurrieron en el siglo XIX. Estos sucesos nos hacen recapacitar sobre el papel fundamental de la cultura y la organización social en un ámbito hostil y baldío. Contamos una historia que parte desde los valores que nacieron en la Revolución Francesa, libertad, igualdad, fraternidad, pero también hablamos sobre el instinto de supervivencia humano y sobre el efecto curativo del arte para evitar la locura.
A parte de las entrevistas realizadas a los especialistas, este documental mezcla por una parte recreaciones de los cuadros de la época para generar unos ‘’cuadros vivos’’ al estilo de los vídeo arte de Bill Viola, en los cuales a través de imágenes en cámara súper lenta se plasman las emociones humanas. Y por otra parte, animamos pasajes de estas recreaciones, especialmente en los capítulos más oscuros de la vivencia de los presos. Para ello hemos utilizado la estética de los cuadros negros de Goya, coetáneos a la época que narramos y que nos sirve para adentrarnos en las emociones y la desolación de los presos, abandonados en esta isla inhóspita.